domingo, 15 de julio de 2018

PUERTA DE LA ALCAZABA. PUERTA DEL ALPÉNDIZ.(1)

PUERTA DEL ALPÉNDIZ.

Visita a la zona.




Nos alegra ver y comprobar como las fortificaciones de Badajoz están siendo rehabilitadas y puesta en valor, es de agradecer que podamos visitar estas zonas e ir descubriendo poco a poco la riqueza arqueológica que encierra.
Hoy nos acercamos a una de las puertas del recinto de la Alcazaba.

































Localización.




La Puerta y la Torre del Alpéndiz reciben su nombre del muro que, partiendo de dicho punto, protegía el flanco norte del Arrabal Oriental que se asentaba en esta ladera del cerro de la Muela.

El alpéndiz (siglo IX o posterior) es un muro que partiendo de la Puerta del Alpéndiz desciende oblicuamente hacia el Arroyo Rivillas. Este muro tenía la función de proteger las viviendas que se encontraban en esta zona de posibles ataques, además de permitir un acceso seguro a puerta anteriormente mencionada.




Pintura digital (óleo)
Puerta del Apéndiz.
Manuel Cuerpo Rocha.


El semibaluarte de San Antonio es el punto donde se une la fortificación abaluartada a la muralla islámica de la alcazaba, cerrando la puerta de Alpendiz.


Detalle.
El entorno.



Panel informativo.
Localizamos este panel informativo en el adarve de la muralla de la alcazaba, zona detrás de la Casa fuerte de Hernán Gómez de Solís, próximo a la torre y puerta del Alpéndiz.
En panel hace referencia a esos dos objetivo. Tomamos en esta entrada del blog, las referencias que se refieren a la Puerta del Alpéndiz.





Leyendo el panel informativo:

La puerta del Alpéndiz.

La puerta del Alpéndiz original era una puerta directa flanqueada por dos torres semicirculares. En época almohade se transformó, con las construcción de una nueva torre, en una puerta de recodo.


La Puerta del Alpéndiz de origen almohade, con un patio pequeño y un corredor en interior de la Alcazaba oblicuo a la muralla.
La puerta está protegida por una torre conocida como la Torre del Alpéndiz. 

El patio de la entrada en recodo estaba decorado hasta media altura con falsa sillería. En la puerta presentaba un arco de herradura, enmarcado en con un alfiz de sillería de granito. Este arco fue mutilado varios siglos después para ensanchar el paso.

El cierre de la puerta del Alpéndiz.

La puerta del Alpéndiz daba salida desde la alcazaba hacia el río Revillas, fue cerrada en 1641 por el Cabildo Municipal, que ordenó tapiarla para asegurar los accesos a la alcazaba debido a la guerra con Portugal.
Cuenta J. García Blanco que, con motivo de la Guerra de la Restauración (1640-1668), las autoridades municipales consideraron que para asegurar la Alcazaba era necesario cerrar la mayor parte de las puertas. Ordenaron tapiar todas las entradas salvo las puertas del Capitel y del Alpéndiz (7 de diciembre de 1640), reconsiderando poco después la medida para cerrar esta última en enero de 1641. Durante la guerra, la puerta fue asegurada con una media luna entre 1652 y 1658.
La narración de Juan Leite sobre el intento de tomar Badajoz en 1652 con ayuda de dos sargentos traidores describe algunos aspectos interesantes de la Alcazaba: cuenta que un sargento flamenco les guio desde uno de los molinos del Rivillas hasta la media luna de la Puerta del Alpéndiz, la cual se comunicaba con la Alcazaba mediante una puerta que al llegar la noche se cerraba. La conspiración fue descubierta a tiempo y no se llegó a consumar la traición, aunque desde entonces la Puerta del Alpéndiz fue también conocida como la Puerta de la Traición.  (2)

En el panel informativo leemos que la muralla abaluartada de Badajoz, construida a finales del siglo XVII,se unía al recinto de la alcazaba en la puerta del Alpéndiz. La antigua puerta almohade quedó cerrada y enterrada, y se abrió una nueva puerta al norte de la torre del Alpéndiz.
Los restos de la casa fuerte de Hernán Gómez de Solís se utilizaron como polvorín.




Detalle.

Portillo y Puerta del Alpéndiz.





Puerta del Alpéndiz, vista desde el exterior.

Visitamos la parte exterior de las murallas de la alcazaba, zona donde se une con las murallas de la fortificación abaluartada, el semibaluarte de San Antonio cerrando la puerta de Alpendiz.



Detalle.

La imagen nos muestra el entronque o empalme de las murallas de la alcazaba con la fortificación abaluartada.
Detrás el edificio del antiguo Hospital Militar, donde hoy se encuentra la facultad universitaria de Biblioteconomía, la cúpula del torreón de Calatrava en la casa fuerte de Hernán Gómez Solís y la parte almenada de la torre del Alpéndiz.



Detalle.

Observamos en el lienzo, a la izquierda de la muralla una "ventana o pequeño portillo", a la derecha el Portillo del Alpéndiz, en medio del lienzo el escudo de los condes de Montijo, detrás de la muralla la cúpula del Torreón de Calatrava en  la casa fuerte de Hernán Gómez de Solís.


La razón de la presencia del escudo de los Condes se debe al hecho de que bajo su mandato se termina este sector de la muralla en 1690. El Conde de Montijo fue General del Ejercito de Extremadura y Capitan General de sus fronteras.


Portillo del Alpéndiz.






Detalle.
Portillo del Alpéndiz visto desde el interior y a través vista de exteriores.

Detalle.
Portillo abierto al cerrarse la Puerta del Alpéndiz.
Perspectiva tomada desde el interior, al fondo antiguo "camino de Mérida", hoy Avenida de Manuel Rojas.



Portillo y  Puerta del Alpéndiz, daban acceso y salida hacia el Camino de Mérida, y hacia el Arrabal Oriental, y posteriormente al antiguo barrio de San Salvador.
Cuando se construyó la fortificación abaluartada, la puerta quedó clausurada tras las murallas y para acceder  a esta zona de la alcazaba desde el exterior se abrió el portillo junto  a la Puerta del Alpéndiz.

El portillo tiene un arco de medio punto de ladrillo y se podía cerrar mediante batientes y un rastrillo.

"Situado junto a la Puerta del Alpéndiz, es una puerta de acceso directo con arco de medio punto de ladrillo y doble sistema de cierre (rastrillo y batientes). Leopoldo Torres Balbás estimó que tanto esta puerta como la del Alpéndiz eran de época islámica. Fernando Valdés sostiene que la puerta fue abierta por los caballeros de Calatrava para controlar el paso a la Alcazaba y especialmente para cobrar los correspondientes portazgos. En opinión de Julián García Blanco, la puerta pudo construirse durante la Guerra de la Restauración, ya que se abre a una altura considerable respecto de suelo exterior de la Alcazaba, y el tramo de la acitara o barbacana situado delante de la puerta no presenta el derrame hacia el exterior que sí tiene el resto de la acitara del frente Este de la Alcazaba, disposición adoptada para ampliar el campo de tiro, que no se aplicó en este punto posiblemente porque estaba enterrado en el momento de la reforma. A la vista de estos indicios, Julián García Blanco plantea que el portillo debió abrirse, o al menos acondicionarse, tras ser terraplenada la zona para construir la media luna que se levantó en este sector en torno a 1641-1644. Dada su anchura, esta puerta parece diseñada para permitir el acceso de vehículos, los cuales sólo podían acceder  a la Alcazaba gracias a un terraplen que a modo de rampa permitiera salvar la barbacana. Para superar la liza (espacio comprendido entre la barbacana y la muralla) fue necesario su relleno, una pasaredera de madera o un puente. En el Cabildo del día 11 de enero de 1677 se acordó reparar el portillo". 



Detalle.

Perspectiva que nos muestra el Portillo del Alpéndiz, hoy cerrado, al exterior.


Detalle.
Barbacana o acitara frente al portillo y torre almenada en lienzo de muralla que daba al arrabal oriental


Detalle.
Entronque del baluarte con la muralla de la Alcazaba.
Portillo con barbacana o acitara. Exterior del arrabal oriental.

Detalle
Barbacana  o antemuro en el Portillo del Alpéndiz.
El portillo tiene un arco de medio punto de ladrillo y se podía cerrar mediante batientes y un rastrillo.


Detalle
Arco de medio punto de ladrillo.
Portillo del Alpéndiz y barbacana o acitara.

Puerta del Alpendiz.







Detalle
Puerta del Alpéndiz.

Como hemos comentado la puerta fué clausurada y se abrió tras su torre una nueva puerta más modesta y de acceso directo. Frente a ella se construyó una luneta terrera, que la protegía del tiro directo que se efectuara desde zonas próximas.






Detalle.

Muralla de la Alcazaba que dan al arrabal oriental.


El arrabal oriental.


Mientras la ciudad musulmana crecía y prosperaba en la Alcazaba y en la Medina, en otros lugares se formaban los arrabales, para recoger a la población de menos recursos. De entre los varios arrabales que existieron en torno a Badajoz, sólo podemos ver restos de uno de ellos, el Arrabal Oriental, que fue además el mayor de ellos. Este arrabal se asentaba sobre la ladera noreste de la Alcazaba, lugar de orografía escarpada. En esta zona también se asentó el antiguo barrio de San Antonio, destruido al construir el sistema abaluartado de murallas.

Estos restos permanecieron ocultos hasta los años 1977-1982, cuando se realizaron unas excavaciones arqueológicas junto al alpéndiz. Desde entonces, parte estos restos han permanecido al descubierto, siendo objeto de deterioro y vandalismo, mientras que los demás permanecen enterrados.



Detalle.
En la imagen observamos la torre  árabe, enclave desde el que se dominó la ciudad en ese periodo,  se sitúa en el sector oriental de la Alcazaba y mira al arrabal del mismo nombre. Sirve de defensa a la Puerta del Alpéndiz que, tras el portillo exterior de la muralla moderna, da acceso al interior del recinto. Es de planta cuadrangular y está realizada en tapia, con elementos posteriores. Pertenece al grupo de torres adosadas a la muralla, entre la que destacan otras como la de las Doncellas, Siete Ventanas, de la Horca, etc…


Detalle.
Arrabal oriental contemplado desde la torre del Alpéndiz. Al fondo el "camino que llevaba a Mérida", hoy Calle Serrano, barriada de San Roque.

En época taifa se atestigua la existencia del llamado arrabal oriental, y su cerca correspondiente. "Es una ciudad en una llanura. Tiene en la parte oriental, un gran arrabal mayor que la ciudad, que fue despoblada por la fitna” (AL-HIMYARI).

"Entre la puerta del Alpéndiz y, más o menos, los jardines de la Galera, se extendió durante la época de mayor esplendor del Badajoz aftasí – siglo XI – un barrio extramuro, en la ladera sur del cerro de la Muela. Es el llamado arrabal oriental, que tenía su cerca correspondiente. Lo que queda se extiende entre la alcazaba y la carretera. Cuando el califato de Córdoba se hundió, una parte de los artesanos y comerciantes se desplazaron a capitales taifas como Badajoz, centro entonces de una intensa actividad económica. El barrio oriental sde formó deprisa y acogió a muchos emigrantes, llegando a superar en extensión a la ciudad. Se dedicaban, entre otras actividades a la alfarería y levantaron sus casas en la aldera, tomndo como eje el camino que llevaba a Mérida – su construcción es la calle Serrano del barrio de San Roque, buscando la protección de la Alcazaba y del Rivillas. Las viviendas eran modestas, construidas con muros de tapial sobre zócalo de piedra, suelos de cal y techos de cañizo, barro, madera y teja. Poseían alcantarillas, excavadas siguiendo la pendiente del cerro ". (2)



Detalle.
Almenas de la torre del Alpéndiz que defendía la Puerta del Alpéndiz..y en primer plano restos de la casa fuerte de Hernán Gómez de Solís.


Detalle.
Adarve en las murallas de la alcazaba, frente a las traseras de los restos de la casa fortaleza de Hernán Gómez de Solís, proximidades de la torre y puerta del Alpéndiz.


Detalle.
Almenas en la zona del adarve de la torre y puerta del Alpendiz que recientemente han sido rehabilitada.



Detalles de la torre del Alpéndiz con las almenas y elementos defensivos.




La puerta del Alpéndiz.


Es una puerta en recodo que dificulta el acceso al interior de la fortaleza mediante un quiebro en ángulo recto. Este sistema defensivo se extiende por Al- Andalus con los almorávides, en el siglo XI. Por ello parece contradictoria la cronología  adscrita a las puertas de la alcazaba de Badajoz, consideradas almohades.

Se abre en línea con la puerta del Capitel, en la parte oriental de la alcazaba, conectando el arrabal con la fortificación. Flanqueada también por una torre, abre al exterior con un aparejo de sillares de granito, de menor calidad que en la puerta del Capitel.

El arco, de herradura apuntado, conduce a un patio cuadrangular abierto: el segundo vano del recorrido es de ladrillo y apuntado. Ha sufrido modificaciones posteriores que enmascaran su aspecto original. Fernando Valdés estima que la puerta a la que vino a sustituir esta puerta almohade era la que comunicaba la Alcazaba con el camino de Mérida. Con el paso de los años este camino se convirtió en uno de los ejes viarios más importantes delarrabal oriental, que se estableció frente a ella.


Distintas perspectivas del entramado defensivo de la puerta y torre del Alpéndiz visto desde el adarve.





Bibliografía.

Folleto Ruta de la Alcazaba de Badajoz.
Ayuntamiento de Badajoz.Concejlía de Turísmo.










https://www.aytobadajoz.es/es/ayto/monumentos/torre-de-la-puerta-del-alpendiz#.W0XXANIza1s (1)

https://www.aytobadajoz.es/files/archivos/ayto/2014_05/memoria_sector_a_completa.pdf   (2)

https://es.wikipedia.org/wiki/Alcazaba_de_Badajoz#Puertas_de_la_Alcazaba     (3)

http://contenidos.educarex.es/mci/2006/27/temas/tema1/013_puerta_alpendiz.html   (4)



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